Filadelfia, PA – En un informe de investigación del “Philadelphia Inquirer” difundido hace algunos días, se encontró que el centro “Devereux Advanced Behavioral Health”, está plagado de irregularidades en cuanto a la supervisión del personal a cargo de los niños con autismo, con otras necesidades especiales, e inclusive niños migrantes a los cuales prestan servicios. El informe señala que al menos 41 niños con discapacidad intelectual han denunciado agresiones sexuales en esta institución durante el último cuarto de siglo.
Devereux, que tiene su sede central cerca de Filadelfia, trata a niños con discapacidades intelectuales, trastornos mentales y traumas. Fue fundado hace más de 100 años, y se presenta hoy como la organización de salud sin fines de lucro líder de su tipo en el país.
El Departamento de Servicios Humanos de Filadelfia (DHS) y Salud Conductual Comunitaria (CBS), decidieron finalizar sus servicios con Devereux, sacar a los 53 niños de Filadelfia de sus campus residenciales y cerrar inmediatamente las opciones para nuevas admisiones, tras sus hallazgos luego de seis semanas de reunirse con niños, hablar con las familias y realizar visitas sin previo aviso a sus instalaciones.
Kimberly Ali, comisionada del departamento de servicios humanos de la ciudad afirmó: “dado que era nuestro proveedor, queríamos evaluar y garantizar la seguridad de nuestros niños en sus instalaciones”. Los hallazgos fueron alarmantes, al tratarse de niños en situación de vulnerabilidad por sus condiciones mentales. “Encontramos empleados totalmente ociosos; que no estaban haciendo su trabajo ni cuidando a los niños de ningún modo”, expresó.
El Comisionado del Departamento de Salud del Comportamiento y Servicios para Discapacidades Intelectuales, que supervisa a la oficina de Salud Conductual Comunitaria (CBH), David T. Jones, declaró: “estamos comprometidos a administrar de manera efectiva y apropiada la prestación de servicios de salud conductual para los jóvenes de Filadelfia. La salud y el bienestar de los jóvenes a nuestro cargo es fundamental”.
El informe del Inquirer señala que algunas víctimas de agresión sexual tenían tan solo 12 años y un coeficiente intelectual menor, los que dijeron haber sido agredidos por el personal de Devereux. Los hechos han ocurrido en los tres locales de los suburbios de Filadelfia, pero también en Nueva Jersey, Texas, Florida, Georgia, Connecticut, Nueva York y Arizona.
Por lo ocurrido, miembros del Concejo Municipal de Filadelfia han exigido que no solo se retire a los niños de los campus de Devereux, si no también que se le cancelen todos los contratos, incluido un acuerdo por $ 7.5 millones que tiene con el Departamento de Servicios Humanos. Filadelfia está trabajando para reubicar a estos 53 niños y continuarán manteniendo la supervisión en las instalaciones de Devereux hasta que todos los niños sean retirados.
El ex fiscal del condado de Chester, Chad Maloney, que ahora representa a algunas de las víctimas que alegan abuso sexual, dijo que su experiencia es que el individuo responsable de abuso es procesado, pero “la historia simplemente no termina, porque es Devereux el que no hace nada; son ellos los que no cambian”. Es terrible saber que quien fue a buscar ayuda, haya terminado encontrando más trauma y dolor.
Con información del Inquirer y la Ciudad de Filadelfia.