Ante la migración forzada masiva nunca vista en el hemisferio occidental, donde se estima que para finales del 2021 más de 8 millones de venezolanos estarán fuera de su tierra buscando refugio y un mejor vivir, luego de dejar atrás un país destruido por el infame socialismo del siglo XXI y la revolución chavista, la diáspora venezolana en EE. UU. se ha organizado con ONG’s para apoyar a esta ola de compatriotas que llegan a estas tierras.
La Casa de Venezuela de Filadelfia fue fundada y establecida como una organización sin fines de lucro en el año 2004, como dice el famoso refrán venezolano: “cuando éramos felices y no lo sabíamos”. Un gran visionario, Víctor García Crespo, se encargó de prender esa llama en varios de sus miembros fundadores para crear un sitio de encuentro cultural y familiar; sin embargo, a medida que la crisis venezolana empeoraba y la nación sucumbía en un colapso total, ahora acelerado por la devastadora pandemia del COVID-19 y en un país con el sistema hospitalario ya en ruinas, la organización se ha ido adaptando para cubrir la nueva realidad de la comunidad. Fue así como a partir del 2014-2015 se le dio un giro de fondo y se planteó enfocarse en proyectos y propuestas de ayuda a la comunidad venezolana en el área de Filadelfia, y a muchos otros en Venezuela.
Uno de estos proyectos en los que se enfocó fue el de impulsar el apoyo legislativo del Tratado de Protección Temporal para los venezolanos o TPS; propuesta con apoyo bipartidista, impulsada por el partido demócrata de la mano del congresista Darren Soto, de la Florida, y el senador Bob Menéndez, de Nueva Jersey; además de otras propuestas legislativas aprobadas en la última legislatura del 2019-2020, como la propuesta VERDAD, o Venezuela Emergency Relief Democracy Assistance and Development Act of 2019.
En el área de Filadelfia, todos los 7 congresistas: Brendan Boyle (D), Madelaine Dean (D), Dwight Evans (D), Chrissy Houlahan (D), Brian Fitzpatrick (R), Mary Gay Scanlon (D), y Susan Wild (D) votaron a favor del TPS para los venezolanos (TPS for Venezuelans Act 2019); sin embargo, no llegó a aprobarse en el senado. Este apoyo a favor se logró gracias a los múltiples encuentros, reuniones y visitas que la directiva de Casa de Venezuela, junto a miembros de la comunidad venezolana llevó adelante por meses, en un proyecto de cabildeo que creó conciencia y educó a nuestros legisladores.
Educar a estos legisladores fue clave para que entendieran la importancia de la crisis en Venezuela; el aporte que traen a sus distritos la bien preparada diáspora venezolana y la necesidad de proveerle protección en los Estados Unidos. El lema usado, “estamos acá para aportar, no para pedir”, marcó el tono de la campaña.
Con el nuevo Congreso del 2021, una propuesta nuestra de ley fue introducida en la Cámara Baja y una similar en el Senado y, desde el primer día, Casa de Venezuela ya estaba trabajando junto con varias organizaciones alrededor del país, como nuestros hermanos de Casa de Venezuela en Orlando para lograr el apoyo, la pronta discusión y la aprobación de la nueva propuesta de TPS para los venezolanos.
Luego de una tensa campaña electoral y con la promesa hecha de que si llegaba a la presidencia otorgaría protección temporal a los venezolanos, Joe Biden llegó a la Casa Blanca y, con menos de 50 días en la Oficina Oval, firmó un decreto para dar un Estatus de Protección Temporal (TPS) a los más de 325 mil venezolanos en los Estados Unidos, junto al secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el cubanoamericano Alejandro Mayorkas.
Se preguntarán: ¿Que está haciendo Casa de Venezuela para afrontar este nuevo reto y esta gran oportunidad para la comunidad venezolana en el área de Filadelfia, para que puedan registrarse con prontitud para el TPS? Hasta la fecha hemos hecho charlas informativas con HIAS Philadelphia, ha pasado listados de organización y abogados de inmigración de bajo costo, y ha creado una gran alianza con dos organizaciones, dos universidades y dos bufetes de abogados para realizar la primera clínica legal de TPS para los venezolanos el próximo 18 de abril en Norristown, Pennsylvania, a solo 25 minutos de Center City.
Las organizaciones ACLAMO, El Centro de Ayuda Comunitaria de Upper Darby, las escuelas de derecho de la Universidad de Villanova y la Universidad de Pensilvania, y los bufetes de abogados de la firma Solow, Hartnett & Galvan, más la firma Sweet & Paciorek estarán apoyando con 20 profesionales en inmigración y ayudado a aquellas familias venezolanas con sus formularios de TPS y la solicitud de permiso de empleo (EAD). Esta clínica es totalmente gratis, pero las personas deben registrarse para poder reservar un espacio de tiempo y poder ser atendidos personalmente por este grupo de especialistas y organizaciones dispuestas a tender una mano a los venezolanos del área.
Esta es la primera clínica legal pero no la última, pues en los meses próximos se tiene previsto realizar otras clínicas sobre el TPS en Delaware y en Nueva Jersey.
Para más información sobre estas clínicas legales y para registrarse, las personas pueden visitar las redes sociales de Casa de Venezuela Filadelfia en Facebook, Twitter e Instagram.