En la ciudad “del amor fraterno” el número de homicidios violentos ha aumentado drásticamente en los últimos años. Tan sólo al día del 27 de septiembre de este año, ya se tenía el registro de 407 víctimas, 19 % más respecto al 27 de septiembre del 2020, según datos de la policía de Filadelfia (phillypolice.com). Entre las causas de estos homicidios están la violación, robo y asalto agravado con armas de fuego.
“En todo el estado, las estadísticas de violencia armada son peores que en el pasado. Y la violencia con armas de fuego, como tantas formas de desigualdad sistémica, daña de manera desproporcionada a las comunidades de color y a las comunidades históricamente marginadas”, Tom Wolf.
Sin embargo, el número de muertes causadas por sobredosis de opioides ha sido mayor, más del 66 % que las causadas por armas de fuego, según datos del Gun Violence Archive (gunviolencearchive.org). Tan sólo en 2018, la ciudad de Filadelfia tenía la tasa de sobredosis más alta que cualquiera de los 10 condados más poblados de Estados Unidos.
OPIOIDES
De acuerdo con el Instituto Nacional de Abuso de Drogas (drugabuse.gov), cada día más de 90 estadounidenses mueren por sobredosis de opioides. El abuso y la adicción de éstos, incluidos los analgésicos recetados, la heroína y los opioides sintéticos como el fentanilo constituyen una crisis nacional grave que afecta tanto la salud pública como el bienestar económico.
En 2020, el fentanilo fue el causante del 81 % de las muertes con opioides, comparado con el 59,8 % en 2017.
El aumento del consumo de drogas inyectables también ha contribuido a la propagación de enfermedades infecciosas como el VIH y la hepatitis C. En 2013, el gasto total en atención médica, incluida estas enfermedades debido a que los usuarios de drogas compartían jeringas, superaba los 28 millones de dólares, según lo publicado en la revista Air & Space Power Journal en 2018.
RACISMO, TRAUMA INFANTIL Y COVID-19
El pasado 13 de septiembre, la ciudad publicó el Informe Anual Inaugural de OD Stat, que detalla los resultados de la revisión de muertes por sobredosis. De acuerdo con este Informe, en el 2020, 1.214 personas murieron en Filadelfia, a causa de sobredosis. De esas muertes, las autoridades revisaron 22 casos para obtener detalles acerca de las muertes, diez eran personas negras es decir el 45 %, nueve blancos no hispanos ósea el 41 %, y tres eran hispanos, el 14 %. A pesar de ser una muestra pequeña de casos, los resultados brindan información valiosa sobre la experiencia de las personas con adicción activa.
Los datos del Informe evidencian que, el racismo, el trauma infantil y la pandemia por COVID-19 han impactado dramáticamente en las cifras de las muertes por sobredosis en la ciudad, aspecto que el Departamento de Salud de Filadelfia debe considerar para enfocar los esfuerzos y la respuesta ante la crisis de muertes por sobredosis. El documento también menciona que las tasas de muerte por sobredosis aumentaron entre los que tenían 35 años o más, hombres y negros no hispanos, que el 27 % de los fallecidos revisados tuvo al menos un miembro de la familia con sobredosis fatal, que 95% de los fallecidos revisados tuvo al menos una interacción con el sistema de justicia penal, que incluye arrestos policiales y encarcelamientos, y que el código postal 19134 tuvo la mayor cantidad de muertes involuntarias por sobredosis en 2020.
La Estrategia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos describe este problema se seguridad como una amenaza que socava el orden a través de crímenes violentos y la muerte de miles de estadounidenses cada año.
DROGAS Y VIOLENCIA
“Mientras que la COVID-19 permea esta nación, también lo están haciendo las organizaciones de crimen internacional y las pandillas violentas, que se ajustan a las restricciones de la pandemia para inundar las comunidades de drogas”, dijo Christopher Evans, administrador de la Administración de Control de Drogas de EE. UU. (DEA) en el reporte anual del 2020.
En la ciudad y zona conurbada, diariamente nos enteramos de actos violentos y de tráfico de drogas.
Recientemente, un hombre de Filadelfia fue arrestado por las autoridades de Montgomery por vender opiáceos a un paciente en el Hospital Einstein al introducir los medicamentos a escondidas en el centro de atención.
Para el alcalde de Filadelfia Jim Kenney, el aumento en la cifra de muertos en la ciudad, le quita el sueño, es algo que le lastima íntimamente, y se cuestiona cómo vamos a resolver esto. Así lo dijo después de que la ciudad superara la pérdida por armas de fuego, de más de 400 vidas durante el año, el pasado miércoles durante la conferencia conjunta que cada quince días está haciendo la Ciudad, para abordar esta otra emergencia en Filadelfia que es la violencia, y en donde cada vez más, tanto perpetradores como víctimas, son más jóvenes y también va en aumento el número de mujeres implicadas.
INCENDIO FUERA DE LA CASA DE ACTIVISTA
Sonja Bingham madre y activista del barrio de Harrowgate, al noreste de Kensington, ha luchado para mantener las calles de su comunidad más limpias y con mayor seguridad. Recientemente su casa, ubicada en E. Madison St., fue violentada cuando alguien roció gasolina y prendió fuego afuera de su domicilio. Al respecto Mark Squilla, miembro del consejo de la ciudad del distrito 1, dijo en una conferencia de prensa que esta persona fue atacada por estar involucrada en la lucha por un mejor lugar para ella y sus hijos. “No toleraremos la anarquía ni la cobardía”, expresó. Por su parte, Bingham mencionó “Veo como las leyes son desiguales (…), hago lo que hago porque creo que las vidas negras y morenas importan, que debemos tener parques limpios, que nuestros hijos deberían ser capaces de jugar y correr por nuestras calles, no creo que alguien debería ser capaz de venir a mi cuadra y dispararle a mi vecino, o quemar mi casa o golpear a nadie”. Añadió “¡No me importa, no me asustaré y no detendré mi misión!”.
Sonja dice que ellos hicieron eso para amedrentarla para que se vaya de ahí, pero son los ellos los que se tienen que ir.