Jeffrey Lurie
Jeffrey Lurie.

Si hay un nombre que resuena con fuerza en Filadelfia, es el de Jeffrey Lurie, el cerebro y el corazón que transformó a los Eagles de una franquicia en apuros en un gigante del fútbol americano. Nacido en Boston en 1951, Lurie creció en una familia judía donde el deporte fue su refugio tras la muerte de su padre a los nueve años. Esa pasión por el juego, alimentada por tardes enteras viendo partidos y estudiando estrategias, lo encaminaría décadas después a escribir una de las historias más exitosas de la NFL.

Con estudios que lo llevaron desde el Buckingham Browne & Nichols School en Cambridge hasta Clark University, Boston University y Brandeis University, Lurie sedestacó en el ámbito académico, en el que obtuvo una licenciatura, una maestría en Psicología y un doctorado en Políticas Sociales. Sin embargo, lejos de limitarse al mundo académico, encontró su camino en el negocio familiar, pues su abuelo materno, Philip Smith, fue el fundador de la cadena de cines General Cinema, un imperio que en su momento controló una parte importante de la industria del entretenimiento en Estados Unidos.

Esta herencia familiar y el ambiente creativo de su infancia lo impulsaron a explorar el mundo del cine por cuenta propia, y en 1985 fundó Chestnut Hill Productions en alianza con Tri-Star Pictures. Produjo películas que, si bien en algunos casos pasaron desapercibidas, le permitieron consolidar una carrera que culminaría con el reconocimiento de la Academia. Fue el productor ejecutivo de tres documentales galardonados con el Oscar: «Inside Job», que retrató la crisis financiera de 2008; «Inocente», de 2013 que destacó la historia de una joven sin hogar y sin papeles; y “Summer of Soul”, que narra el Festival Cultural de Harlem de 1969. Su empresa de producción, Play/Action Pictures, ha producido varios documentales aclamados por la crítica.

PASIÓN POR EL DEPORTE

La pasión de Lurie por el deporte siempre estuvo latente. Durante su juventud se convirtió en asiduo espectador de los equipos de Boston, y en una etapa en la que ya no se conformaba con ser simple aficionado, comenzó a soñar con tener un papel más activo en el fútbol americano. En 1993, intentó adquirir el equipo de su ciudad natal, los New England Patriots, pero las circunstancias no se alinearon a su favor.

Sin embargo, el destino le brindó una oportunidad inigualable al comprar los Philadelphia Eagles en 1994 por la considerable suma de 195 millones de dólares; una cifra que, en aquel entonces, marcaba un hito y que hoy, en pleno auge de la NFL, se ve eclipsada por el valor actual del equipo, que según Forbes ronda los 6.6 mil millones de dólares. Desde ese momento, la visión y la determinación de Lurie han quedado plasmadas en cada decisión que ha tomado, al transformar a los Eagles en una organización con una mentalidad ganadora, tanto en el campo como en la comunidad.

La gestión de Lurie ha estado marcada por la audacia y la innovación. Bajo su mando los Eagles han logrado un récord impresionante, han acumulado victorias y alcanzado múltiples apariciones en los playoffs, e incluso se han coronado campeones del Super Bowl en 2018 y 2025. Su enfoque ha trascendido lo deportivo y llega a lo empresarial, pues ha invertido en infraestructuras de primer nivel, como el moderno Lincoln Financial Field, que sirve a los aficionados y también es una fuente considerable de ingresos para la organización.

UN EQUIPO EN CONSTANTE EVOLUCIÓN

Su filosofía de “no tratar de hacer lo popular, sino de hacer lo que uno cree correcto” se ha reflejado en decisiones arriesgadas: la salida de entrenadores legendarios y la reestructuración de figuras clave dentro del plantel han sido parte de su estrategia para mantener al equipo en constante evolución y adaptarse a las exigencias de un deporte cada vez más competitivo.

El éxito de los Eagles bajo la batuta de Lurie no es fruto del azar, sino el resultado de una combinación de visión empresarial, pasión deportiva y una capacidad innata para tomar decisiones difíciles. Su legado se ve reflejado en cada triunfo, en cada práctica y en cada partido, pero también en el impacto positivo que su equipo tiene en la comunidad filadelfiana. En sus propias palabras, celebrar la diversidad, fomentar la inclusión y llevar al equipo a nuevas alturas son objetivos que trascienden lo deportivo y forman parte de su compromiso con la sociedad.

Al ver a los Eagles alzarse con trofeos y al dueño levantar con orgullo el segundo Lombardi Trophy, se puede apreciar la trayectoria de un hombre que ha sabido transformar un sueño en una realidad. Con un patrimonio personal que se estima en más de 5.3 mil millones de dólares, Jeffrey Lurie figura entre los empresarios más destacados de Estados Unidos y es un ejemplo de cómo la pasión, el riesgo y la perseverancia pueden cambiar el rumbo del deporte en una ciudad entera.

VICTORIA CON SABOR A “NUEVO ESTADIO”

La victoria de los Philadelphia Eagles en el Super Bowl podría impulsar la posibilidad de que Filadelfia sea sede de un Super Bowl en el futuro. Con el estadio actual del equipo, Lincoln Financial Field, que cumple 22 años, Lurie ha mencionado la idea de construir un nuevo estadio con domo o renovar el existente. Este cambio permitiría a la ciudad albergar eventos de gran envergadura, como el propio Super Bowl o la Final Four de la NCAA.

La negociación del nuevo estadio, cuyo contrato de arrendamiento vence en 2032, podría verse favorecida por la creciente influencia y popularidad del equipo. Además de beneficiar a los Eagles, un nuevo estadio podría formar parte de un distrito de entretenimiento en el sur de Filadelfia, similar al exitoso Battery Atlanta de los Braves. Este proyecto, junto con el nuevo estadio de los Sixers, podría transformar la zona en un centro turístico y comercial.

ÁMBITO PERSONAL

En el ámbito personal, la vida de Lurie también ha estado llena de matices interesantes. Su primera unión matrimonial con la mexicana Christina Weiss, con quien tuvo dos hijos, después de la separación, la ex esposa de Lurie continuó participando como socia minoritaria en los Eagles, y liderando la fundación.

Más adelante, en 2013, Lurie encontró el amor nuevamente al casarse con Tina Lai, una mujer que conoció en circunstancias humildes, trabajando en un deli, y que proviene de una familia de inmigrantes vietnamitas que ha sabido labrarse un lugar en la vida cultural y gastronómica de Filadelfia. La historia de Tina, con sus raíces de superación y emprendimiento, encaja perfectamente con la narrativa de Lurie, quien ha sabido transformar riesgos en triunfos tanto en el deporte como en el cine.

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Adrian R. Morales González
Es periodista, editor, poeta, traductor y corrector de estilo, licenciado en Lengua Inglesa por la Universidad de La Habana y magíster en Periodismo y Comunicación Social por esa casa de altos estudios. En su natal Cuba se desempeñó como reportero de la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina y de la revista Somos Jóvenes. En el 2002 se mudó a Santo Domingo, República Dominicana, país del que obtuvo la nacionalidad y donde ha laborado como editor de las revistas Mercado, Refugios y Deleite y de otros medios impresos y digitales. En la actualidad es editor de contenido de la revista Bohío, editor de la sección de turismo del periódico Dominican Today, y corrector editorial del Departamento de Publicaciones del Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña (ISFODOSU). En el año 2000 obtuvo el Premio ESTI a la Prensa por su artículo “El traductor: ¿ente anónimo o creador?”, que otorga la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) y el Equipo de Servicios de Traductores e Intérpretes (ESTI). En 1998, Prensa Latina lo reconoció por ser el primer periodista de prensa escrita en divulgar el descubrimiento en Cuba de la familia negra del pintor español Pablo Picasso. Por sus más de 20 años en el periodismo turístico, la Organización Mundial de Periodismo Turístico (OMPT) le otorgó en 2018, en Panamá, el Premio Internacional Pasaporte Abierto “A la Trayectoria”. En 2023 obtuvo el premio Pasaporte Abierto en la categoría “Investigación periodística”. Adrian Rafael Morales González, también fue corresponsal de Alhucema: Revista de Literatura y Teatro, que se edita en Granada, España, en la que ha publicado teatro, poesía, traducciones y artículos. Tiene en proceso de publicación el cuaderno de poesía Vals de los ogros y se encuentra inmerso en la creación de su primera novela.

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